Maria Montessori
Doctora en medicina, psiquiatra, antropóloga, militante socialista y feminista de principio del siglo XX, Maria Montessori fue una precursora en la observación y la comprensión del niño. Es una de los primeros pedagogos en desarrollar una ciencia de la educación, Maria Montessori crea su método pedagógico a lo largo de su vida, evolucionando en función de sus formaciones, viajes, encuentros, pero, sobre todo a partir de la observación de los niños.
Maria Montessori nació en 1870 en Italia. Hija única, llega a Roma con sus padres a la edad de 5 años.
Su afición por las ciencias la empuja a estudiar medicina, hecho por el que deberá luchar dado que la universidad de Roma estaba reservada a los hombres en esa época. A los 26 años se convierte en la primera mujer médica de Italia.
Mujer comprometida, participa activamente en la campaña a favor de los derechos políticos y sociales de las mujeres, representando a su país en el Congreso Internacional por los derechos de la Mujer en Berlín, en 1896.
En 1897, Maria Montessori empieza a trabajar en la clínica psiquiátrica de la Universidad de Roma y entra en contacto con niños y adultos con problemas mentales, internados en salas comunes sin ningún tipo de actividad. A partir de esta situación iniciará sus reflexiones sobre el niño, sosteniendo que las soluciones no son necesariamente médicas o químicas, sino más bien educativas.
De este modo, planteadas las bases, cuando accede a la dirección de la escuela orto frénica de Roma, sus investigaciones seguirán los pasos de dos grandes médicos-educadores franceses: Jean Itard y Edouard Seguin. Maria Montessori retoma y desarrolla el material elaborado para las personas con retraso sensorial (letras rugosas, etc…). Los niños que están a su cargo aprenden a leer y a escribir al igual que los otros alumnos. Entonces Maria Montessori se pregunta sobre los obstáculos que impiden a « los alumnos sanos y alegres de las escuelas ordinarias” a no superar los exámenes de los niños con deficiencias.
En 1907, en la primera « Casa dei Bambini » se ocupa de niños de 3 à 6 años de un barrio pobre de Roma (San Lorenzo), Maria Montessori crea un auténtico laboratorio de investigación pedagógica donde evoluciona de sorpresas a descubrimientos y de descubrimientos a la conceptualización de la “pedagogía Montessori” (ámbito preparado, fenómeno de atención, libre elección de la actividad, baremo del material de autocorrección, etc). Descubre “el niño y su secreto”, según su propia expresión, secreto que se encuentra en el poder de concentración. El niño, libre de escoger su actividad, de manipular y repetir tantas veces como sean necesarias, centra su atención en los objetos de la actividad y puede concentrarse durante largo tiempo. Se vuelve en un ser tranquilo, más social, respetuoso con el trabajo de sus compañeros, hasta transformar su propio ámbito familiar.
Maria Montessori vivió las dos guerras mundiales del siglo XX, que la obligaron a huir de Italia para vivir en Estados Unidos, en España, en Inglaterra, en la India y en los País Bajos.
En todos sus viajes, ella continúa observando a los niños, percibiendo sus necesidades fundamentales y universales. A fin de explicar sus descubrimientos, Maria Montessori escribe numerosos libros, algunos orientados a la práctica y otros al análisis pedagógico.
Falleció en 1952, a la edad de 81 años, en Holanda.